En 2021, Rachel Koogan estaba en busca de departamentos en alquiler por la ciudad de Miami, Florida, para poder estar más cerca de su familia. Durante la exploración, encontró un increíble departamento de un dormitorio, ubicado encima de un centro comercial. No dudó en mudarse y todos los días reafirma que fue la mejor decisión.
El departamento está localizado arriba de Brickell City Center, con lo que tiene acceso directo al centro comercial. “Estaba lista para un cambio, quería mudarme cerca de mis padres y amo Florida. Amo su clima, sus habitantes, su cultura. Cuando vi este departamento, me lancé de inmediato a por él”, le comentó Koggan a CNBC Make It, que compartió su historia. El precio inicial era de US$3100 al mes, pero dada su imponente locación, Rachel ofertó 3350 dólares para destacarse de las demás solicitudes.
“Ni siquiera pude visitar o ver la propiedad en persona antes de hacer una oferta. Había investigado mucho sobre el edificio y estaba segura de que me gustaría, pero básicamente tuve que basarme en las fotos”, agregó.
Durante el segundo año de renovación, el alquiler mensual aumentó, llegando a los 4200 dólares. Sin embargo, la mujer de 34 años consiguió bajar el precio del tercer año a US$4150. La renta es más costosa que la que pagaba en su estudio de Nueva York, pero se compensa con el gran espacio y la locación.
En la actualidad, la mujer continúa en la vivienda y presume su patio trasero cada vez que puede. “Fue el mejor descubrimiento del mundo. Ahora es mi parte favorita de mi departamento y, siempre que alguien viene de visita, funciona como una especie de truco de fiesta para mostrarles cómo es mi patio trasero. Sinceramente, me brinda mucha diversión y alegría todos los días”, manifestó.
El departamento está compuesto por el living principal, unido a la cocina, así como la habitación de dormir con terraza incluida, un closet personal, un baño y medio y un cuarto de limpieza. Además, el edificio incluye comodidades como un spa, un gimnasio y un espacio al aire libre.
En sus cuentas anuales, Rachel debe abonar dos depósitos de seguridad, uno para el edificio y otro para el dueño del departamento, de 6700 dólares en total. Además, tiene que depositar una tarifa especial por su mascota. “Técnicamente, a los inquilinos no siempre se les permite tener mascotas en los edificios. Mi perro es un perro de servicio, así que teníamos eso a mi favor. Sin embargo, queríamos que mi oferta fuese atractiva para el dueño, por eso decidimos ofrecer un depósito de mascota”, señaló.
Como recompensa por ser residente del Brickell City Center, Rachel tiene invitación gratuita a los eventos del shopping, compuestos por las famosas “horas felices” que incluyen promociones en bebidas, seminarios especiales y la oportunidad de probar la comida de nuevos restaurantes antes de su apertura.
“Al principio, compraba más de lo que debería. Pero ahora pude calmarme, entiendo mis límites y tengo una mejor relación con mis compras. Aunque sigo amando el salir a comprar, me llena de alegría”, añadió.
LA NACION