Aunque la rebaja del Impuesto País del 17,5% al 7,5% significará un menor costo de importación, el traslado del alivio impositivo a los precios será progresivo.
El impacto no se reflejará de forma inmediata, sino cuando industriales y comerciantes accedan a insumos más económicos, ya que los artículos que se fabricaron o compraron con la alícuota más alta conservarán el concepto en el precio de venta.
En ese sentido, en el sector explican que dependerá de la decisión de los proveedores de trasladar la baja en función de su estructura de costos y la incidencia del componente importado.
A su vez, remarcan que por la caída de ventas “se resignaron márgenes y hay que ver cuánto están dispuestos a seguir bajando precios”. Al respecto, destacan que ahora tampoco se elimina el Impuesto País, como esperan que ocurra en diciembre.
Productos que prevén baja progresiva de precios
No obstante, algunos rubros vislumbran que el efecto de la medida se podría notar en unas semanas. La reducción de 10 puntos porcentuales que retrotraerá la carga impositiva al nivel previo al 13 de diciembre tendría impacto en el precio de productos importados por el campo, adelantó la Bolsa de Comercio de Rosario.
Para maquinaria agrícola, se trajeron, fundamentalmente, piezas por US$ 528 millones en los últimos cinco años, por lo que la entidad infiere que la baja de la alícuota tendría un impacto fiscal positivo de US$ 52,8 millones anuales y su eliminación significaría US$ 93 millones por año.
La reducción de costos de insumos extranjeros que demandan productoras nacionales obligaría a mejorar su competitividad ante la oferta de maquinaria proveniente de otros países, analizó la Bolsa de Cereales de Córdoba.
Además, estimó una baja de precios en fertilizantes importados, especialmente nitrogenados y fosfatados, que explican el 60% del consumo del agro argentino, versus el 40% que abastece el mercado local.
En alimentos, el mayor impacto se vería en enlatados como conservas, cócteles de frutas y jardinera, al igual que en cápsulas de café por la rebaja también en el aluminio y acero que dispuso el Gobierno al disminuir el arancel de importación.
La Asociación Supermercados Unidos (ASU) detalló que el mayor impacto se verá en eslabones de la cadena vinculados a insumos y se reflejará, inicialmente, en pocos productos, como atún, café, y, en menor medida, galletitas. No esperan que las góndolas se llenen de mercadería importada.
Mientras tanto, rubros con fuerte caída de ventas saldrán con precios más económicos para incentivar el consumo, como celulares, artículos de electrónica y electrodomésticos, a los que les cayó la demanda un 33% en el primer semestre, según GfK.
La Cámara Argentina de Distribuidores Mayoristas de Informática, Productores y Afines (Cadmipya) advirtió que la reducción del tributo ayudará a reactivar las ventas de notebooks y equipos de informática, que están un 50% abajo que hace un año.
Así las cosas, en esta instancia la baja de precios sería leve y no proporcional a la baja tributaria. De acuerdo al Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), el Impuesto País representa un 2%, 4% y 6% del precio de venta final neto de IVA en ciertos bienes nacionales con insumos importados.
Calculó que en un producto de $ 1.000 (US$ 1,05) implicaría una rebaja del 1,14% ($ 11,4 o US$ 1,05) bajo el supuesto de traslado pleno, 2,3% ($ 23 o US$ 0,02) y 3,4% ($ 34 o US$ 0,04), respectivamente.
“Implica una reducción de la carga tributaria sobre los bienes, ya que en algún momento del proceso productivo usan insumos importados. La clave está en la puja en la cadena de producción y comercialización. Habrá que ver si las empresas capturan la nueva brecha para incrementar sus márgenes o realizan un traslado parcial o total de la rebaja, adelantó.