IRSA, una de las principales desarrolladoras inmobiliarias del país, le compró al empresario Francisco De Narváez un megaterreno vecino al shopping Alto Avellaneda. Pagará US$ 12,2 millones.
La propiedad totaliza 86.861 metros cuadrados y tiene una superficie construida de 32.660 m2, con potencial de expansión a futuro. Ese predio supo ser de Walmart y quedó en poder del grupo del empresario argentino luego cuando adquirió la cadena de supermercados.
Por eso, ahí hay un Changomas (el nombre que tomaron las exsucursales de la firma norteamericana), además de un Norauto, un Easy, de la cadena chilena Cencosud, y un McDonald’s.
La transacción contempla la cesión a IRSA de los contratos de alquiler vigentes hasta su término original y la firma de un nuevo contrato de alquiler con el supermercado por 3 años.
El precio de compra se fijó en US$ 12,2 millones, de los cuales ya se abonaron US$ 9,2 millones y el saldo de US$ 3 millones será cancelado junto con la escritura traslativa de dominio, que se encuentra pendiente, informó IRSA.
“Esta operación forma parte de nuestra política de renovar los 14 centros comerciales que operamos, consolidar nuestro liderazgo en el sector y, en lo que hace a Alto Avellaneda, continuar innovando en la zona sur del Gran Buenos Aires”, dijo Eduardo Elsztain, presidente de IRSA. “Alto Avellaneda está entre los shopping de IRSA con mayor facturación y número de visitantes”.
El concepto detrás de las expansiones de los shoppings es el de las experiencias y el entretenimiento. Así fue que en el Alto Avellaneda -que fue inaugurado en 1995- está el parque de juegos bajo techo más grande de la región y que reforzarán la propuesta gastronómica. Ya tienen ocho salas de cine y un complejo deportivo con canchas de paddle, básquet y fútbol 5.
NE