WhatsApp es una de las aplicaciones que más se usa todos los días, y no destacas solo por su utilidad, sino por la inmensa cantidad de funciones que le fueron agregando con el paso del tiempo. No obstante, hay algo que existe hace un poco más de tiempo.
Se trata de los emojis, a los que antes se conocían como emoticones. Cada uno representa una situación, sentimiento o reacción en particular. Pero hay algunos que son confusos y difíciles de descifrar, como puede ser el caso del emoji de una carita con los dientes apretados.
Qué significa este emoji originalmente
El emoji de la cara con dientes apretados, conocido como Grimacing Face, fue creado para representar emociones de incomodidad, tensión o vergüenza. Su objetivo nunca fue mostrar simpatía ni alegría, sino reflejar esas situaciones en las que no sabemos bien cómo reaccionar y aparece un gesto rígido.
Se lo asocia principalmente con momentos incómodos, nervios frente a un resultado incierto o negatividad frente a un comentario inesperado. Es esa típica expresión de “ups” o de estar atrapado en una situación difícil de manejar.
Parte de la confusión viene de su diseño: al tener los dientes a la vista y una forma parecida a una sonrisa, muchos usuarios lo interpretaron como un gesto alegre. Sin embargo, está mucho más vinculado a la tensión y a la incomodidad.
En definitiva, su significado original busca transmitir nerviosismo o malestar, lo que lo convierte en uno de los emoji más ambiguos dentro de las conversaciones digitales.
Cuándo y cómo usarlo correctamente
Este emoji se usa con acierto cuando querés reflejar vergüenza leve sin necesidad de aclararlo con palabras. Un ejemplo típico es cuando cometés un error mínimo en una charla y lo acompañás con esta cara para restarle dramatismo.
También es útil para mostrar nerviosismo simpático, como al esperar una respuesta importante o cuando no estás del todo seguro de algo y lo querés expresar de manera más ligera.
Otra forma de usarlo es para suavizar un comentario incómodo. Si tenés que dar una opinión negativa o reconocer algo que puede molestar, este emoji ayuda a transmitir que no lo decís con mala intención, sino desde una incomodidad compartida.
Eso sí, no es recomendable en contextos demasiado formales o serios, porque puede dar una impresión equivocada o poco profesional. Además, hay que considerar que no todos entienden su sentido real: algunas personas lo leen como una sonrisa exagerada, lo que puede cambiar por completo el mensaje que querías dar.