8 ideas originales para esconder el tender, las bicicletas o las herramientas del jardín

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Ir a notas de Natalia Iscaro

Cuando proyectamos el diseño de un jardín, debemos tener en cuenta nuestros gustos y necesidades para crear espacios especiales y únicos. En nuestros jardines, siempre habrá vistas que queremos destacar y otras que deseamos ocultar. El diseño cuenta con recursos para trabajar puntos focales según se requiera.

Cerco enrejado de hierro acompañado de vegetación y futura trepación. Archivo Revista Jardin

María Laura Vidal Bazterrica, paisajista y miembro de Jardineras en Acción, nos ilustra cuáles pueden ser estas vistas indeseables. “Los vecinos, el tender para la ropa, la parrilla, los pasillos, las ventanas, los balcones, los edificios, entre otras”. ¿Cómo es posible lograrlo con el diseño? La especialistas nos aporta algunas ideas:

Espejos

El espejo es un elemento que refleja los colores y las texturas, duplica el espacio y oculta las vistas molestas. Vidal Bazterrica detalla: “Los bordes se desdibujan con materiales o vegetales”. En este sentido, es importante colocar alguna planta u otro elemento en el frente que nos indique que es un espejo para no pasar de largo, como por ejemplo calas.

Los espejos transforman un espacio, duplican el verde y también esconden vistas indeseables. Archivo Revista Jardin

Macetas

Es una de las herramientas más utilizadas. “Cuando el espacio es pequeño y pasan caños o cables que hacen imposible plantar a suelo, recurrimos a macetas con las que sí podremos trabajar”, aporta Vidal Bazterrica. Y aporta que idealmente sea con árboles o arbustos”.

La amplia variedad de macetas disponibles en el mercado nos permite jugar con el diseño, combinar con el espacio, sectorizar y cubrir vistas indeseables. Archivo Revista Jardin

Listones de quebracho

Siempre estéticos y con un estilo rústico, el quebracho ayuda a crear un ritmo. “Colocado de forma espaciada, con trepadoras o arbustos en el medio, como por ejemplo eugenias, logra un efecto diferente y más económico, escondiendo vistas que preferimos tener cubiertas”, aporta la paisajista.

La madera siempre aporta su dosis de calidad, convive con el entorno natural y también permite cubrir. En este caso, listones de quebracho. Archivo Revista Jardin

Cañas gruesas y secas (o eucaliptos)

Vidal Bazterrica detalla que las cañas gruesas y secas no pasan desapercibidas porque “poseen un impacto visual muy fuerte y cumplen muy bien con la función de tapar vistas”. Eso sí, advierte que es aconsejable enterrarlas en la tierra con cemento en la base y guías de alambre. “Si plantamos una trepadora por delante, lograremos dar movimiento con color. Es fundamental su mantenimiento, pintándolas con productos específicos para exterior dos veces al año”, concluye.

La combinación de naranja con verde acompaña la impronta del diseño. Las macetas son una incorporación de diseño que da la nota de color a la vez que cubre un espacio. Archivo Revista Jardin

Cerco vivo

En este punto, no hay que apostar a lo clásico. “Frutos, flores, texturas y colores de las hojas aportan mucha vida, elegancia y practicidad al diseño del jardín, además de que tapan rápidamente (de dos a tres años) las vistas feas, y nos brindan intimidad”, detalla la paisajista, y da como ejemplo al ilex.

Un cerco vivo es otra de las posibilidades, cuando hay un jardín y se desea cubrir al vecino, herramientas de trabajo, de la pileta, o incluso un baño de exterior. En este caso, acompañado de un cantero al frente. Archivo Revista Jardin

Muros y paredes

“Con el color es posible lograr un impacto visual que genera sensaciones de alegría, placer, luminosidad, tranquilidad, además de que agrandan o achican espacios, entre otras cosas”, apunta Vidal Bazterrica. Para lograr esto, y así lograr esconder aquellas vistas menos agraciadas, debemos trabajarlos con relieves como fósiles, agua, piedras, luces y elementos arquitectónicos. “Son otra alternativa para engañar al ojo”.

Con una impronta artística, los murales aportan una dosis pictórica a un entorno, acompañan y enmarcan, cubriendo también aquello que no debe ser visto. Archivo Revista Jardin

Efectos de luz y sombra

Lo cierto es que algunas veces no necesitamos tapar totalmente la vista, sólo distraerla un poco. Es aquí cuando podemos trabajar con “efectos con palos, arbustos o árboles colocados de forma estratégica (mirando hacia el oeste)”, apunta la especialista, y agrega: “Así lograremos que los rayos del sol los atraviesen, creando dibujos sobre el piso o una pared; en estos casos un elemento para utilizar puede ser el mimbre”.

A tono con la estética de la casa, el uso de palos de madera pintados marca un punto de atención para el ojo, la excusa puede ser estética, pero el objetivo logrado es cubrir de la vista lo indeseado. Archivo Revista Jardin

Treillage

Para ocultar un tender, candil, bicicletas, motos, sillas y demás elementos de mantenimiento del jardín y la pileta, la experta recomienda un mix de “madera, troncos pelados, pajas bravas o alambre galvanizado”. Son ideales para cubrir las vistas y para acompañar un diseño, además de ser funcionales.

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@jardinerasenaccion2021

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