Javier Milei considera que la foto del jueves a la noche junto a los economistas que integrante formalmente su equipo económico oficial, “es el ancla fiscal”. La imagen transmite la conducción de la política fiscal, monetaria, desregulatoria y legislativa, cohesionada detrás de que las cuentas fiscales no sólo tienen que cerrar en cero este año sino también el próximo.
Milei subió la foto a su cuenta de X a las 23.40 del jueves a la noche. El Senado ya había aprobado la ley que para el Presidente conspira contra su plan fiscal y rápidamente comunicaría que la vetaría, a través de la Oficina del Presidente.
“No nos van a voltear el superávit fiscal”, escribió adjuntando la selfie que tomó minutos antes José Luis Espert, presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda Cámara de Diputados y Diputado Nacional PBA por la LLA.
La reunión del jueves en Olivos estaba pactada de antemano. No se sabía qué sucedería en el Senado. El objetivo era conversar entre todos los economistas sobre los puntos del Pacto de Mayo y para ello reunir los principales cuerpos de la conducción económica: el Ministerio de Economía, el Ministerio de Desregulación, el Banco Central, el Consejo de Asesores del Presidente y el referente económico de LLA en el Congreso. Salvo Santiago Bausili (titular del BCRA), estuvieron las cuatro cabezas de cada uno de estas áreas (Luis Caputo, Federico Sturzenegger, Demian Reidel y Espert).
La reunión de trabajo sucedió en el edificio de la Jefatura de Gabinete, uno de los chalets de la Quinta de Olivos. Para muchos de los presentes no sólo fue la primera vez en Olivos sino también la oportunidad de estar todos juntos en el mismo lugar (en verdad fue la primera vez que Milei juntó a toda la tropa económica de ese modo).
Cuando salieron de la sala fueron caminando a lo que se llama El Quincho para cenar.
“Sirvieron chorizo, morcilla, asado, vacío, pollo, ensaladas verdes y rusa. De postre flan con dulce de leche y ensalada de fruta”, contó un invitado. “Para tomar, agua”.
Cuando terminaba la cena el Senado aprobó la ley. Y Milei comunicó su veto. Muchos de ellos continuaban hablando del equilibrio fiscal y los planes para 2025. Estaba Carlos Guberman, secretario de Hacienda, y la persona del equipo que más sabe sobre técnica presupuestaria y finanzas públicas.
Para Guberman debe ser como música para sus oídos escuchar a Milei. El Presidente cuenta por estos días que le tuvo que decir a tres ministros “no tengo plata” cuando fueron a hablarle de fondos extras. “Hablen con Caputo, no conmigo”.
Pero el excel y los números no bastan. Enseguida, luego de la cena, empezó una catarata de tuits con la selfie de Espert había sacado: para Milei se trataba de la verdadera “ancla fiscal”, más allá del excel.
Escribieron en X:
“Casta, vení a tocarme el superávit fiscal”, puso Espert.
“El equilibrio fiscal no se toca y el garante es nuestro Presidente, el mejor del mundo”, Felipe Núñez, un economista del BICE y que se desempeñó con Caputo:
“Preparando la defensa del superávit fiscal”, Sturzenegger.
“Querida casta, vení a tocarnos el superávit fiscal”, Miguel Boggiano, asesor del Presidente.
“El equilibrio fiscal es intocable”, Martín Vauthier, asesor de Economía.
“Casta, vení a tocarme el equilibrio fiscal”, Pablo Quirno, secretario de Finanzas
“El equilibrio fiscal es inquebrantable”, escribió Federico Furiase, asesor de Economía.
Milei cerró con: “No nos van a voltear el superávit fiscal. Viva la libertad carajo”.
El Presidente suele decir que “me van a tener que matar, o sea me van a tener que sacar de la Casa Rosada para que haya déficit fiscal”.
El ex asesor de la Casa Blanca Stuart Eizenstat en su trabajo Los economistas y las decisiones en la Casa Blanca, muestra una conclusión luego de trabajar con dos presidentes (James Carter y Ronald Reagan). Dice que los economistas que trabajan con un presidente deben jugar en equipo y dejar de lado la alta consideración de sí mismos cuando el Presidente no comparte sus ideas.
Esto Macri no lo logró y Milei busca revertirlo no sólo en el excel. También en las redes.