Tras las denuncias de fraude en las elecciones en Venezuela y las protestas contra Nicolás Maduro, el gobierno de ese país no sólo mantiene el asedio contra la embajada de Argentina en Caracas sino que intimó a retirarse al personal diplomático países como Perú y Panamá, entre otros.
La decisión del gobierno de Maduro se extiende a la suspensión de todos los vuelos aerocomerciales de esos países, con lo cual tanto la aerolínea Copa, de Panamá, como LATAM, de Perú, debieron dejar de volar a Caracas.
Se trata de dos de las únicas tres aerolíneas que hoy aterrizan en la Argentina y que mantienen la conexión con la capital de Venezuela.
La tercera aerolínea que llega a Ezeiza y también a Caracas es la colombiana Avianca, que por el momento mantiene sus vuelos hacia el país con el cual comparte una extensa frontera.
Copa Airlines suspendió los vuelos el martes. A través de un comunicado señaló que «el Ministerio de Transporte de la República Bolivariana de Venezuela anunció la suspensión temporal de todos los vuelos aerocomerciales entre Panamá y Venezuela» y ofreció a los pasajeros un cambio de fecha y/o un cambio de origen/destino dentro de la misma región, «sin cargos adicionales» o bien la cancelación del viaje, manteniendo el valor del boleto en crédito para una fecha de viaje futura. Incluso ofreció el reembolso de los boletos no utilizados.
En el caso de LATAM, con numerosas filiales en la región, su filial LATAM Perú suspendió los vuelos hacia Caracas el miércoles. Es la única de esa empresa que hasta ahora conectaba a Buenos Aires con Venezuela.
«LATAM Airlines Perú informa que la autoridad aeronáutica venezolana ha determinado la suspensión temporal de todos los vuelos entre Perú y Venezuela desde el 31 de julio hasta el 31 de agosto del presente año. En esta línea, LATAM Airlines Perú ha debido suspender – de manera temporal – los vuelos entre Lima y la ciudad de Caracas durante ese período», anunció la aerolínea.
Al igual que en caso de Copa, LATAM señaló que la suspensión «es ajena a la voluntad» de la empresa y ofreció a los pasajeros «flexibilidad para cambios y/o devoluciones sin costo adicional».
Hasta el momento, Avianca sigue siendo la única opción para viajar en vuelos regulares de pasajeros a la capital de Venezuela.
La línea aérea colombiana informó que «estamos en constante monitoreo de la situación y por el momento seguimos operando con normalidad. En caso de alguna novedad se los dejaremos saber».
Los vuelos de Avianca son hacia Bogotá y también hacia Medellín, ya que hasta el acuerdo bilateral que se firmó en marzo, había muy pocas frecuencias disponibles hacia la capital de ese país.
Otra alternativa disponible para llegar a Caracas, aun más indirecta, es un vuelo de Gol hacia San Pablo que hace conexión con Bogotá, pero que no llega a la capital venezolana, para lo cual sería necesario contratar un vuelo aparte.
Ninguna línea aérea de la Argentina vuela a Venezuela desde 2017: hasta ese año, Aerolíneas Argentinas llegaba a Caracas con un vuelo directo una vez por semana, pero dejó de hacerlo en agosto de 2017, en medio de los disturbios de aquel año.
Por entonces ya habían suspendido temporalmente sus vuelos a Caracas casi todas las aerolíneas europeas y estadounidenses, y también líneas regionales como LATAM y Avianca. Estas dos retomaron posteriormente sus vuelos a Venezuela, pero Aerolíneas no: la ruta directa, de entre siete y ocho horas de vuelo, no fue reanudada.